Tras un año de la creciente del río Nima, que desvió el cauce de la quebrada La Pacha, aún hay obras sin realizarse, pese a las recomendaciones de la Corporación.
QUEBRADA LA PACHA REQUIERE DESCOLMATACIÓN
B-103, Palmira 9 de abril de 2018
Funcionarios de la regional Suroriente de la CVC adelantan recorridos y seguimientos a obras de protección y zonas con riesgo para verificar su estado y hacer las recomendaciones pertinentes ante la llegada de la primera temporada de lluvias en la región. Es el caso de la quebrada La Pacha, en el corregimiento de Tablones en Palmira, cuyo cauce resultó desviado hace un año por la creciente del río Nima y donde aún no se han realizado las obras correctivas que la CVC recomendó desde ese momento.
En esa ocasión La Pacha se colmató en todo su recorrido, lo que generó represamiento y desviación de su cauce. Ante esta situación, la Corporación realizó el respectivo informe técnico que remitió con recomendaciones a la Oficina de Gestión del Riesgo del municipio y a la Secretaría de Infraestructura, con el fin de que ellos, como entes competentes, ejecutaran los trabajos correspondientes para evitar que en una nueva época de lluvias se presenten desbordamientos e inundaciones.
“Estamos en abril, el segundo mes más lluvioso del año y la CVC ha recomendado a los alcaldes atender los cauces de ríos y quebradas que pudieran ocasionar emergencias. Un ejemplo de esto es la quebrada La Pacha, donde el cauce está muy colmatado y en algunos tramos el agua no está a la vista lo que representa un riesgo ante la temporada invernal que está comenzando”, comenta Isabel Cristina Echeverri, coordinadora de la Unidad de Gestión de Cuenca Amaime.
Actualmente esta quebrada se encuentra sedimentada y en la parte alta de su nacimiento el caudal es mínimo. Además del riesgo que esto representa se afecta el abastecimiento para actividades agrícolas y pecuarias que se desarrollan en la zona.
El llamado que hace la CVC a las entidades competentes es a que se tomen las respectivas medidas y acciones para evitar riesgos que puedan generar graves afectaciones principalmente a las viviendas que se encuentran asentadas en esta zona.
“Una de las recomendaciones que se da a las comunidades de la zona es básicamente que se siga preservando el cauce de la quebrada y su zona forestal protectora que, recordemos, es de 30 metros a lado y lado, sin intervención de ganado principalmente y sin la adecuación o instalación de infraestructura en dicha franja, precisamente para que en el momento que se pueda presentar un evento no genere consecuencias como daños a esa infraestructura o vidas humanas”, agregó Isabel Cristina Echeverri, coordinadora de la UGC Amaime.
La CVC reitera a los entes municipales el llamado a estar alerta ante cualquier situación que se pueda presentar y atender las recomendaciones efectuadas en la circular enviada por la Autoridad Ambiental a la Gobernación y alcaldías del departamento.
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Proyectó: Paula Andrea Sepúlveda Z. – Grupo de Comunicaciones CVC – DAR Suroriente – fijo 2660310
Revisó: Isabel Cristina Echeverri A –Hermann Bolaños –Wilson García.
