La mayoría de las ladrilleras de Palmira no cuentan con título minero ni permiso de emisiones atmosféricas. Ante esta situación, la CVC solicitó de manera inmediata a la Alcaldía, tomar acciones para mitigar los impactos ambientales que se están generando en Palmira a causa de dicha actividad productiva. La Administración Municipal está concertando con propietarios de estos negocios soluciones recomendadas por la Corporación como construir un horno comunitario.
ALCALDÍA CONCERTA SOLUCIONES COMO UN HORNO COMUNITARIO
B-163, Palmira 31 de mayo de 2017´
“Dado que la actividad de fabricación de ladrillos es una actividad tradicional y cultural en el municipio, se ha exhortado a que la Administración Municipal implemente alternativas para reducir los impactos ambientales generados por las emisiones atmosféricas que se emanan, de la mano de una intervención social que promueva el desarrollo sostenible en el municipio”, dice Isabel Cristina Echeverri coordinadora de la Unidad de Gestión de la Cuenca de Amaime de la CVC
Desde el 2017 la CVC requirió al municipio ante la problemática generada por los establecimientos dedicados a la manufactura de arcilla o ladrilleras, que en Palmira alcanzan los 38 ubicados en Coronado y Guayabal vía Tienda Nueva, principalmente.
La CVC pudo evidenciar que la gran mayoría de estos establecimientos no cuentan con título minero para la extracción de arcilla, ni con permiso de emisiones atmosféricas, y en general no cuentan con ningún tipo de licencia o permiso para el desarrollo de dicha actividad. Además requieren el desarrollo de un plan de recuperación morfológica que garantice la recuperación y estabilidad geomorfológica de los suelos.
Adicionalmente, la actividad artesanal de cocción de arcillas se hace en hornos artesanales tipo Pampa y los establecimientos visitados no disponen de ductos o chimeneas para verificar el cumplimento legal de la norma de emisiones y según las encuestas realizadas a los propietarios, en promedio cada ladrillera produce alrededor de 32.000 unidades al mes, para un total en el municipio de 1’094,000 unidades de ladrillos de los cuales sólo el 17.65% de los desechos se reincorporan al proceso, mientras que el 29,4% de estos se llevan a las escombreras.
En este sentido, la Administración Municipal se reunió con los propietarios de estos establecimientos para llegar a acuerdos atendiendo las recomendaciones de la CVC en cuanto al diseño y construcción de un horno comunitario para cada sector, que concentre las emisiones atmosféricas y estas puedan ser controladas y medidas de una manera más efectiva, que se estudie la posibilidad de reubicación de los establecimientos de fabricación de ladrillos a un lote fuera del perímetro urbano y que se ejerza el respectivo control a la urbanización en inmediaciones de los sectores dedicados a esta actividad industrial.
Con el reconocimiento de experiencias exitosas en otros municipios y que pueden ser ejemplo de reconversión tecnológica, el compromiso de la Administración Municipal y la conciencia de quienes fabrican ladrillos, la CVC realizará el seguimiento a las acciones emprendidas.
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Proyectó: Paula Andrea Sepúlveda Z. – Grupo de Comunicaciones CVC – DAR Suroriente – fijo 2660310
Revisó: Isabel Cristina Echeverri- Hermann Bolaños- Wilson García
