El director general de la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca, CVC, Rubén Darío Materón Muñoz, presentó en el marco del congreso en Bogotá las diversas metodologías y procesos para administrar más de 8.000 concesiones de aguas superficiales y 2.000 de aguas subterráneas, garantizando la disponibilidad para el consumo humano, actividades agropecuarias e industriales. Se refirió también a la operación del embalse de Salvajina.
EN EL MARCO DEL PRIMER CONGRESO NACIONAL DEL AGUA ORGANIZADO POR LA ANDI
B-173 Bogotá, junio 06 de 2018.
Tener a la cuenca hidrográfica como unidad de análisis, estudiando la relación del suelo, la cobertura vegetal, caudales y el uso que hacemos del agua, la presencia en el territorio, la regulación del embalse de Salvajina y el apoyo de una moderna Red de Hidroclimatología compuesta por más de 250 estaciones, son algunas de las metodologías empleadas por la CVC para administrar el recurso hídrico en el Valle del Cauca.
“Trabajamos en la planificación de nuestras 47 cuencas a través de Planes de Ordenamiento y Manejo de Cuencas Hidrográficas y ahora, con mucho énfasis, en los Planes de Ordenamiento del Recurso Hídrico. En la CVC nos esforzamos para garantizar un uso sostenible del agua, así como para formular e implementar ambiciosos planes de descontaminación, por eso hemos aprovechado este escenario para divulgar lo que hacemos entendiendo la importancia del agua y su adecuada gestión”, afirmó Rubén Darío Materón Muñoz, director general de la CVC.
Durante el certamen, la CVC pudo entregar información relacionada con los estudios, que permitieron identificar un sistema acuífero constituido por sedimentos aluviales, transportados y depositados por el río Cauca y sus tributarios. Este acuífero cuenta con un volumen total de agua almacenada de aproximadamente 40.000 millones de metros cúbicos, equivalentes a 44 embalses de Salvajina.
En el Valle del Cauca se tienen inventariados 1.548 pozos activos, de los cuales el 69% se usa para el riego de cultivos como la caña de azúcar, 23% se usan para el suministro de agua al sector industrial y el 8% se usa para el abastecimiento público de diferentes comunidades. Todo se tiene caracterizado, su recarga y por ende su aprovechamiento sostenible.
“Es muy interesante la dinámica de coordinación interinstitucional y las alianzas público privadas en las regiones que muchas veces no se conoce. El Director de la CVC nos hablaba por ejemplo de la regulación del Embalse de Salvajina y el trabajo con los agricultores del Valle para hacer usos eficientes del agua”, afirmó Margarita Pacheco Montes, moderadora del Panel del Recurso Hídrico y columnista de la revista Semana.
Frente al embalse multipropósito de Salvajina, el Director de la CVC informó que cada hora se monitorea el nivel, las lluvias y el caudal de entrada y salida del embalse, a través de estaciones automáticas de medición. Salvajina beneficia al Valle del Cauca y a Colombia en general y su operación es una labor coordinada entre la CVC y Epsa.
“Recordemos que en el último mes hemos tenido una operación especial de Salvajina, la medida se adoptó desde el 6 de mayo y busca contribuir al manejo de la situación en la represa de Hidroituango. Como consecuencia, desde esa fecha hasta hoy el nivel en Salvajina ha subido 19.9 metros y se han embalsado 331 millones de metros de cúbicos de agua del río Cauca. Hoy Salvajina está al 83% de su capacidad total, el propósito es mantener la medida hasta mediados de mes cuando las condiciones climatológicas cambian hacia el segundo periodo seco en la región”, puntualizó el Director de la CVC.
“Todas las experiencias conocidas hoy demuestran que sí existe un relacionamiento entre autoridades ambientales, academia, comunidades y empresas donde por ende las Corporaciones Autónomas Regionales son actores claves de esta gestión porque es desde allí donde se promueve la política pública para la gestión integral del agua”, expresó Ricardo Lozano, director del Centro Nacional del Agua de la Andi y organizador del Congreso.
Finalmente, se informó en el Congreso que los colombianos redujeron en un 30% el consumo de agua en los últimos dos años pero que se debe avanzar aún más en el contexto de la reducción de pérdidas de agua potable que está por el 40%, un porcentaje alto para un país que quiere un crecimiento económico sostenible.
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Proyectó: Wilson García
