TECNOLOGÍA AL SERVICIO DE LA AGRICULTURA Y EL AMBIENTE
Han llegado a un acuerdo con la CVC para el reporte periódico de este proceso de aspersión, que busca evitar que la solución química caiga sobre áreas de interés ambiental, especialmente cuerpos de agua.
B-235 Cali, 7 de octubre de 2024
En un esfuerzo conjunto para mejorar la eficiencia de la industria azucarera, alineada con la sostenibilidad ambiental, funcionarios de la CVC participaron en una actividad clave organizada por Asocaña y el Ingenio Mayagüez, que consistió en el uso de drones para la aspersión de madurantes sobre los cultivos, mejorando la exactitud en la aplicación. Los madurantes ayudan a maximizar la producción de sacarosa, un componente esencial para dicho sector de la economía regional y nacional.
“Concertamos una matriz de reporte entre la CVC y los ingenios azucareros, que permitirá una mayor transparencia y control en la aplicación de madurantes. Esta matriz incluye tanto la programación de las aplicaciones como los reportes posteriores, lo que facilitará el seguimiento por parte de la CVC, con el fin de que las prácticas se realicen de manera responsable y dentro de los límites de las licencias ambientales”, explicó Herbert Olaya Cuesta, profesional especializado de la Dirección Técnica Ambiental de la corporación vallecaucana.
Las prácticas innovadoras, como el uso de drones y reguladores fisiológicos de bajo impacto, son un paso importante hacia una agricultura más eficiente y sostenible en el Valle del Cauca, asegurando que los beneficios económicos no vayan en detrimento de los recursos naturales.
El Trinexapac-etil es un componente químico que se prepara con agua y se aplica dos meses antes de la cosecha, actuando como inhibidor de la hormona del crecimiento de la planta. Al redirigir los carbohidratos hacia la acumulación de sacarosa, este producto aumenta el rendimiento del cultivo. No obstante, su uso inadecuado es perjudicial para ecosistemas acuáticos, especialmente para peces, y puede tener consecuencias menores sobre mamíferos rumiantes, si cae sobre los pastos o forrajes de los que se alimentan.
La responsabilidad de la CVC, como garante de las buenas prácticas ambientales, se hace evidente en su rol de supervisión de los ingenios, asegurando que las aplicaciones de madurantes respeten las franjas de protección cercanas a centros poblados, cuerpos de agua y áreas protegidas. El camino hacia una producción más responsable está marcado por la colaboración interinstitucional y el uso de tecnologías avanzadas.
Redactó: Mauricio Guzmán Ferraro – Comunicaciones CVC
Revisó: Herbert Olaya – Profesional especializado DTA CVC
Wilson García – Comunicaciones CVC